El viernes pasado se llevó a cabo en Pergamino la 38ª edición de la reunión anual del Programa Nacional de Control de Fiebre Hemorrágica Argentina, organizada por el Instituto de Enfermedades Virales «Julio Maiztegui». El evento contó con la participación de autoridades nacionales, provinciales y municipales, además de profesionales de la salud de las principales provincias afectadas por la enfermedad. Marita Conti, directora del Instituto Maiztegui y organizadora del evento, dialogó con Gustavo Pérez Ruiz en su programa de Radio Mon Pergamino y brindó detalles de los avances alcanzados.
Un foro clave para la ciencia y la salud pública
Conti destacó la alta concurrencia de participantes y el enriquecimiento de las mesas de trabajo que abordaron temas como la vigilancia epidemiológica, el tratamiento y la inmunización. «Fue una jornada muy nutritiva, con la participación de referentes de las provincias de Buenos Aires, Córdoba, Santa Fe, La Pampa y Santiago del Estero, quienes compartieron los avances en epidemiología, vacunación y donación de plasma», señaló la directora. Además, se enfatizó el valor de la colaboración entre los distintos niveles del sistema de salud para enfrentar la fiebre hemorrágica argentina (FHA), una enfermedad endémica en varias regiones del país.
Avances científicos y tecnológicos
Uno de los aspectos más destacados de la reunión fue la presentación de los avances en la secuenciación genética de la vacuna CANDIS-1, utilizada contra la fiebre hemorrágica. «Hemos logrado evidenciar la estabilidad genética de esta vacuna a lo largo de los años, lo que refuerza su efectividad», explicó Conti. Este avance ha sido posible gracias a la adquisición de nuevo equipamiento en el Instituto Maestegui, que permite un monitoreo más preciso y eficiente del virus.
Otro de los hitos fue la mejora en la logística de distribución de la vacuna, que desde 2007 está incluida en el calendario nacional de inmunización. «Ahora, las jurisdicciones no tienen que venir a buscar las dosis al instituto, sino que las vacunas se integran a la distribución nacional junto con otras, lo que mejora la trazabilidad y asegura su correcta conservación», afirmó Conti.
El rol crucial del plasma inmune
La directora del instituto también subrayó la importancia del uso de plasma inmune en el tratamiento de la FHA, un recurso limitado que debe ser administrado dentro de los primeros ocho días desde la aparición de los síntomas. «Este año, marcado por el mayor brote de dengue en la última década, fue esencial descartar la FHA en muchos casos sospechosos y utilizar el plasma de manera eficiente», explicó.
Conti reveló que el Instituto Maestegui ha mejorado la recolección de plasma con la adquisición de un equipo móvil de aféresis, lo que permite que los donantes sean atendidos en sus localidades y puedan donar con mayor frecuencia. «Es un avance muy importante para garantizar la disponibilidad de plasma inmune para los pacientes», aseguró.
Panorama epidemiológico del año
En cuanto a los casos reportados, Conti indicó que hasta la semana 41 de este año se confirmaron 45 casos de FHA y seis fallecimientos, distribuidos principalmente entre las provincias de Buenos Aires y Santa Fe. San Nicolás, en Buenos Aires, fue el área más afectada con 14 casos, mientras que Rosario y Villa Constitución en Santa Fe reportaron el mayor número de pacientes dentro de su provincia.
Aunque los casos confirmados superan levemente los del año pasado, el balance de 2023 es similar al de 2022. «Seguimos trabajando en la vigilancia epidemiológica, y el brote de dengue de este año nos obligó a estar aún más alerta», añadió Conti, subrayando la importancia de la capacitación constante del personal de salud y la sensibilización de la población sobre la enfermedad.
Campañas de vacunación y concientización
Conti concluyó la entrevista reiterando la importancia de la vacunación para prevenir la FHA. Recordó que la vacuna es gratuita, segura y está disponible para personas mayores de 15 años. «Es fundamental continuar las campañas de concientización, porque la vacunación es la herramienta clave para prevenir la enfermedad», expresó.
La jornada dejó en claro que la colaboración entre las distintas jurisdicciones y el Instituto Maiztegui, junto con los avances tecnológicos y la dedicación de los profesionales de la salud, son fundamentales para seguir combatiendo la fiebre hemorrágica argentina y garantizar una respuesta eficiente a futuros brotes.
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