En una sesión tensa y llena de incidentes, el Concejo Deliberante de Pergamino volvió a ser escenario de conflictos. Ignacio Maiztegui, concejal de Juntos, brindó detalles sobre lo sucedido en la última reunión, que una vez más quedó inconclusa debido a la falta de quórum y situaciones que se salieron de control.
En declaraciones al programa La Mañana de la Radio por LT35 Radio Mon Pergamino, Maiztegui describió los momentos de tensión que marcaron la sesión, señalando que los mismos actores que habían asistido a la sesión anterior volvieron a protagonizar disturbios. Según el concejal, la presencia de manifestantes, representantes de movimientos sociales y sindicatos generó un ambiente hostil que impidió el desarrollo de la sesión en un marco de normalidad.
El concejal relató que las interrupciones, gritos y agresiones verbales impidieron que varios de sus colegas pudieran expresarse libremente. En medio de la tensión, Mariana de Sautu, concejal de su bloque, sufrió una descompensación y tuvo que ser retirada del recinto para recibir atención médica. Maiztegui criticó que la oposición aprovechara este hecho para dar por finalizada la sesión por falta de quórum, sin interesarse por el estado de salud de la concejal afectada.
Además, el concejal cuestionó las agresiones dirigidas específicamente hacia las mujeres del Concejo, las cuales describió como “muy desagradables y fuera de lugar”. Las sesiones han sido transmitidas en vivo por medios locales y están disponibles en redes sociales, permitiendo a la comunidad observar de primera mano lo que el concejal calificó como «una situación anormal e inaceptable para el funcionamiento de un cuerpo legislativo».
Maiztegui también abordó el reclamo de la oposición sobre la necesidad de una audiencia pública para tratar ciertos expedientes. El concejal defendió que dicha audiencia aún no ha sido convocada porque el pedido no cumple con todos los requisitos, entre ellos, la verificación de firmas, un paso que establece la normativa vigente.
Por último, Maiztegui instó a las autoridades del Concejo Deliberante a asegurar condiciones que permitan sesiones en paz, en un ambiente de respeto, y subrayó que la democracia exige que las instituciones puedan funcionar sin interferencias. La próxima sesión quedó programada para el lunes 11 de noviembre, con la esperanza de que se desarrolle en un marco de respeto y normalidad.
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